Disfrutar cada momento de la vida. claves para vivir el presente con plenitud

Desde hace tiempo nos estamos orientando a disfrutar cada momento de la vida. Los pequeños detalles han ganado valor, tanto en lo personal como en lo profesional. No te preocupes por un futuro incierto: ocúpate de hacer tu presente perfecto, y eso te acercará a un futuro pleno.

Tenemos que entrenar la capacidad de vivir el ahora, sin quedarnos atrapados en lo que fue o lo que será. Para lograrlo es necesario desarrollar conciencia: cuando la cultivas, empiezas a percibir sensaciones que antes pasaban desapercibidas, aprendes a valorar cada instante, cada emoción, cada experiencia, cada persona que te aporta algo valioso.

Es como cuando dejas de ir con el piloto automático y empiezas a tomar el control de verdad. No se trata de fluir sin rumbo, sino de estar presente y tomar decisiones con intención. Y ahí descubres que incluso los días más exigentes tienen momentos que merecen la pena.

Elegir conscientemente tu estado emocional

La forma en la que vives tus momentos la eliges tú. Elegir conscientemente tu estado emocional te permite experimentar la vida de forma más intensa, positiva, auténtica. Te ayuda a tomar distancia de lo que no te aporta, y a acercarte a lo que te hace bien. Deja de quejarte: las quejas no cambian nada, salvo tu estado de ánimo. Hace un rato le decía a una de mis mejores amigas: “¿Cuándo te voy a ver feliz? ¿Cuándo me vas a decir que has tenido un día cojonudo?”. No solo quiero ser feliz yo; también quiero que mi entorno lo sea. Porque eso me da fuerza, me inspira, y me impulsa a sacar cada día lo mejor de mí.

El entorno y la actitud: cómo influye en tu bienestar

El entorno influye, por supuesto. Y la vida no siempre es fácil. A veces nos enfrenta a situaciones que no podemos cambiar, pero que sí podemos aceptar. Y en esa aceptación, sin resignación, hay fuerza. No permitas que te hundan. Aférrate a lo que te hace bien: a los detalles, a las personas, a aquello que necesitas para seguir avanzando. Como dice un proverbio chino: “Si caminas solo, irás más rápido. Si caminas acompañado, llegarás más lejos”.

Además de vivir el presente, entrena tu fuerza de voluntad. Piensa menos, actúa más. Porque tú eres el único que puede boicotear tus propios planes.

Y sobre todo, una frase que llevo como un eslogan desde la primera vez que la escuché, porque me marcó como si fuera magia:

“Sé el tipo de persona que te gustaría conocer.”

Esa idea te impulsa a mejorar, a crecer, a dar lo mejor de ti y, sobre todo, a sacar la mejor versión de ti mismo.